(Foto: Senado de la República)
Reducir la deuda de Petróleos Mexicanos (Pemex) será la tarea prioritaria que tendrá María del Carmen Bonilla Rodríguez al frente de la Subsecretaría de Hacienda de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Este miércoles, el Senado de la República ratificó en el cargo de la funcionaria quien había sido propuesta por la presidenta, Claudia Sheinbaum Pardo.
Cabe destacar que Bonilla Rodríguez fue nombrada en 2021 como titular de la Unidad de Crédito Público y Asuntos Internacionales de la SHCP, en donde dirigió las operaciones orientadas a la emisión de deuda para apoyar financieramente a la petrolera estatal mediante esquemas de fondos pre-capitalizados.
El nombramiento de María del Carmen, el cual se dio en el mismo acto en el que los senadores ratificaron también a Omar Reyes Colmenares como titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, se da en el contexto de una nueva estrategia para fortalecer las capacidades financieras y operativas de Pemex.
En este sentido, la administración de Sheinbaum está buscando un equilibrio correcto entre los pasivos de la empresa y los activos que pueda incorporar o desarrollar hacia el futuro.
En la sesión de este día, Bonilla adelantó una tercera medida relacionada con la amortización de deuda en los mercados.
“Va a haber una tercera medida que no les puedo adelantar, que se va a anunciar en su momento, que tiene que ver también con las amortizaciones de la deuda de mercado. Y por eso, tanto el secretario de Hacienda, como la presidenta de la República, fueron muy puntuales en decir que esta estrategia va a generar un desendeudamiento”, expresó.
Acciones específicas para Pemex
El gobierno de Sheinbaum ha puesto en marcha diversas acciones dirigidas a poner en equilibrio las finanzas de Pemex, entre las que destacan la reducción del costo financiero de la deuda que mantiene Pemex en los mercados; la creación de un fondo de inversión en infraestructura por 250 mil millones de pesos destinados a proyectos estratégicos, y la optimización del balance del sector público mediante una estrategia que busca equilibrar los pasivos de Pemex con activos futuros.
Igualmente se incluye la emisión de deuda con fondos pre-capitalizados que permitió a Pemex mejorar su perfil crediticio, lo que, a su vez, se reflejó en la elevación de la calificación de Pemex de ‘B+’ a ‘BBB’ con perspectiva estable por parte de Fitch Ratings.