El estado de Nuevo León está experimentando un boom económico con la llegada de nuevas empresas con perfiles tecnológicos y de innovación correspondientes al concepto de la llamada Industria 4.0 que, principalmente, tienen una forma “diferente” en cuanto a su consumo de energía.
“Son empresas, muchas de ellas intensivas en el uso de energía, con fuertes montos de inversión y la generación de empleos especializados”, explicó Eduardo Sánchez Martínez, director general de la Agencia de Energías Renovables de la entidad nuevoleonense.
En conversación con Abril Moreno, directora general de Energía a Debate, el titular del recientemente creado organismo, dependiente del gobierno de Nuevo León, afirmó que un ejemplo de ello es la construcción de la megafábrica de la compañía norteamericana automotriz Tesla, a establecerse en el municipio de Santa Catarina.
“La llegada de nuevas empresas con perfiles tecnológicos, de innovación, en el uso de nuevas tecnologías de un concepto de industria 4.0 es lo que estamos viendo en el nuevo perfil de empresas”, refirió.
La empresa tecnológica IBM define a la Industria 4.0 como la transformación digital en campo y en los procesos de producción, con toma de decisiones en tiempo real, productividad mejorada, flexibilidad y agilidad.
Agrega que los fabricantes integran nuevas tecnologías en sus procesos, que incluyen Internet de las cosas (IoT), computación y análisis en la nube, la Inteligencia Artificial y el llamado machine learning en sus instalaciones de producción y en todas sus operaciones.
Respeto a la Agencia, su creación fue anunciada en febrero de 2023 bajo el nombre oficial de Agencia para la Promoción y Aprovechamiento de Energías Renovables, cuyo principal objetivo es promover la transición de la entidad hacia energías limpias, además de ayudar a las empresas instaladas y por instalarse en la localidad a cumplir con sus compromisos corporativos de un uso de energía verde en sus procesos.
En la charla con la directora de este medio, Sánchez Martínez afirmó que Nuevo León es un estado superavitario en cuanto a disponibilidad de energía eléctrica; sin embargo, aún con ello, la Agencia prevé como un reto, por un lado, la optimización en el uso de la energía ante la llegada de todas estas empresas y, por el otro, la infraestructura necesaria para hacer llegar dicha energía a los centros de carga.
Al respecto, expuso como contexto que del cien por ciento de las compañías que están establecidas en Nuevo León, 3 por ciento corresponde a empresas medianas y grandes; esto es, con plantillas de 100 o 150 puestos de trabajo hacia arriba.
“Si asumimos que este 3 por ciento de las empresas por su tamaño demandan energía eléctrica en mediana tensión o en alta tensión y lo comparamos con las ventas internas de CFE a nivel de suministro básico, tenemos que este 3 por ciento de empresas consumen el 60 por ciento de la energía local”, dimensionó.
En este escenario, la construcción de transformadores nuevos y la ampliación de las redes de transmisión y de distribución eléctrica podrían tomar un tiempo que, ante la llegada de las nuevas empresas, la entidad no tiene.
Por ello, dijo Eduardo Sánchez, la estrategia ha sido impulsar la formación de “polígonos energéticos” que incluyan un número de parques industriales por zonas. Esto permitirá la recepción de nuevas empresas que decidan establecerse en el estado, así como la ampliación de algunas ya existentes.
Lo anterior, añadió, posibilitará a la administración proyectar la demanda de electricidad principalmente en las zonas de mayor concentración industrial, además de establecer parámetros en la calidad de la energía sin dejar de lado el cumplimiento del Código de Red y los programas de eficiencia energética.
“Podemos pensar en un proyecto macro de infraestructura a través de estas solicitudes agrupadas en el que una empresa, o varios parques industriales con varias empresas, agrupen su carga y hagan una sola solicitud al Cenace de impacto al sistema y puedan compartir esa inversión”, detalló el funcionario local respecto al esquema a operar.
De esa forma, consideró, se está optimizando la inversión del sector privado para la conexión de sus cargas en obras de infraestructura tanto de transformación principalmente, como de distribución.
Nuevo León en la Transición Energética
Alrededor de 90 por ciento de la disponibilidad de energía en Nuevo León proviene de los hidrocarburos, principalmente del gas natural, esto por las necesidades propias de las industrias y por las ventajas que brindan las centrales de generación con tecnología de ciclo combinado, explicó Sánchez Martínez.
“No obstante, muchas empresas están demandando energías limpias, energías renovables y es ahí donde la transición energética, de cómo vamos a ir migrando de una u otro es el principal objetivo de la Agencia”, apuntó.
Comentó que en algunas zonas de los alrededores de la zona metropolitana de la ciudad de Monterrey se ha encontrado potencial para la instalación de centrales generadoras a partir del viento.
A este respecto, también dijo que en la Agencia han percibido “un apetito” por parte de los capitales privados para el desarrollo de proyectos de generación eólicos y solares fotovoltaicos “como se dio hace años”.
Consciente de que los permisos y dictámenes técnicos para la viabilidad corresponden a la Federación, en la figura de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), respectivamente, Eduardo Sánchez anotó que la Agencia presta asesoría en cuanto a las zonas con mayor potencial de desarrollo.
En este punto aclaró que, por el momento, en Nuevo León no son viables los proyectos de generación de gran escala, como la planta fotovoltaica en construcción en Puerto Peñasco, Sonora, con una capacidad instalada prevista de 1,000 megawatts (MW), debido al superávit que actualmente tiene la entidad.
Pero, aseguró, la puerta está abierta para proyectos con capacidades de entre los 50 y los 200 MW a instalarse en puntos estratégicos.
En este renglón incluyó los proyectos bajo las figuras de abasto aislado y de generación distribuida.
Contacto con la Agencia para la Promoción y Aprovechamiento de Energías Renovables del Estado de Nuevo León: