En México operan 359 empresas del sector hidrocarburos que están obligadas a presentar su Programa para la Prevención y el Control Integral de Emisiones de Metano (PPCIEM) ante la Agencia de Seguridad Energía y Ambiente (ASEA); sin embargo, solo 99 han cumplido con este requisito, advierte Erika Ortiz Sánchez, gerente de energía de Iniciativa Climática de México.
Durante la conferencia de prensa por el primer aniversario del Observatorio Mexicano de Emisiones de Metano (OBMEM), la especialista advirtió que este monto solo representa 28 por ciento del total de las empresas obligadas a presentar el programa.
“Aquí quisiera poner un asterisco, porque eso es con base en la información que nos dan, probablemente hay más, pero eso es lo que podemos sacar al momento, entonces uno de los objetivos más grandes es tener esa información clara y definida para tener una base de cómo estamos realmente”, añadió la especialista.
Luisa Sierra, directora de Energía de Iniciativa Climática de México (ICM), recordó que el gobierno federal se comprometió a invertir dos mil millones de dólares para eliminar las emisiones de metano en los campos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Sin embargo, Erika Ortiz comentó que existe incertidumbre sobre la suficiencia de estos recursos para cumplir con las expectativas.
“No sabemos si la inversión anunciada por AMLO sea suficiente, tendrían que hacerse un estudio mucho más preciso de cada uno de los campos y medidas que deben implementarse, sí creemos que es una muy buena propuesta de destinarlo, porque como ya lo hemos mencionado, las medidas en el sector petróleo y gas son costo efectivas, sí bien sí son inversiones millonarias comparadas con otras medidas, son redituables”, aseguró.
La especialista añadió que el país ya cuenta con todas las bases para implementar las medidas, lo que implica la tecnología y las políticas públicas.
“Es un buen paso, pero hasta el momento no sabemos y no se tiene información de cómo van esas inversiones o como se han destinado pero sabemos que están ahí y la COP es una buena oportunidad para que México se comprometa o pueda dar información de cómo se ha avanzado al respecto”, comentó.
De acuerdo con Juan Méndez, gerente de Incidencia Pública de Nuestro Futuro, las emisiones de metano son el segundo gas de efecto invernadero en el país, después del dióxido de carbono, y 10 por ciento del total provienen del sector petróleo y gas.
Además, el metano contribuye 86 veces más al cambio climático en los primeros 20 años de su emisión.
Por ello, en el OBMEM, integrado por Nuestro Futuro, el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA) e ICM, consideran que la reducción de emisiones de metano es esencial para lograr los objetivos climáticos, y la COP28 brinda una oportunidad única para generar consenso y progreso en esta área.