Rescate… a cualquier costo
El rescate de Petróleos Mexicanos, el Pemex de todos los mexicanos, implica todo un paquete de estrategias implementadas por el gobierno federal que incluye algunas, quizá, legalmente cuestionables. Resulta que entre noviembre y diciembre de 2021 y enero del siguiente año, entidades regulatorias federales empezaron a solicitar a importadores privados de diésel vía marítima algunos requisitos que no necesariamente están explícitamente establecidos en la Ley u otro ordenamiento, esto para permitir la descarga del combustible en puertos del país, principalmente de Veracruz. Desde los muelles nos comentan que lo anterior obligó a que un número de buques-tanques se quedaran parados en los puertos con su carga a cuestas en espera de que el asunto se destrabara para poder hacer sus entregas. Algunos malpensados nos dijeron que el problema no fue regulatorio, sino de precios: el combustible importado era más barato que el producido por Pemex. Para nadie es un secreto que la refinación de petróleo crudo no es para nada buen negocio y, en materia de diésel, Pemex abastece apenas 60 por ciento de la demanda nacional. Aquí aplica la máxima que dice: Si no puedes apagar el fuego en tu casa, incendia la del vecino. Otra promesa renovable En ...