La calificadora internacional Moody’s Investor Services advierte que el crecimiento económico de algunos países de la zona euro será más lento al esperado, mientras que la inflación será más alta para el resto de este año y el siguiente, debido a posibles impactos de la crisis energética en la región.
El Producto Interno Bruto de los países que comparten el euro tuvo un crecimiento de 0.6 por ciento anual durante el segundo trimestre, pero advierte que el alza en países individuales de la zona euro está ligado a su vulnerabilidad a las interrupciones del suministro de gas natural ruso, entre otros factores.
En un escenario base, precisa Moody’s, el PIB de la zona euro crecerá 2.5 por ciento este año, pero se desacelerará a 0.3 por ciento el año entrante.
Uno de los países más afectados es Alemania, que tuvo un crecimiento de 0.1 por ciento del PIB durante el segundo trimestre.
“La economía depende en gran medida del gas ruso para calentar hogares y negocios, para la industria y para la generación de energía y, por lo tanto, es muy vulnerable a los cortes en los flujos de gas desde Rusia”, refirió la calificadora.
La energía también está jugando un papel fundamental en la inflación, que afecta la capacidad de compra de los ciudadanos europeos y las previsiones de crecimiento para el resto del año y 2023.
La calificadora precisa que la inflación pesará sobre la confianza de los consumidores que ya está en niveles muy bajos y frenará el consumo de la zona euro mientras se prolongue la crisis energética.
En julio de este año, la inflación del Índice Armonizado de Precios al Consumidor alcanzó 8.9 por ciento, contra 8.6 por ciento anual en el mes previo.
Sin embargo, al descontar productos como alimentos, energía, alcohol y tabaco, el indicador subyacente se ubicó en cuatro por ciento.
“Dado el shock inflacionario de la oferta por la escasez de energía, se necesitará una postura de política monetaria restrictiva para alinear la demanda con la oferta reducida y así evitar el riesgo de una espiral de salarios y precios o condiciones estanflacionarias”, refirió el estudio de Moody’s.
En este sentido, Francia también será afectada por la inflación, por lo que el crecimiento económico de ese país será de 0.5 por ciento el año entrante, contra un pronóstico previo de uno por ciento.