La administración pública no está peleada con el sector privado en materia energética; sin embargo, es necesario generar reglas claras en el sector, consideró la senadora morenista, Rocío Abreu.
Durante el foro Infraestructura energética en México: avances, proyectos y oportunidades de inversión, la funcionaria mencionó que el país no puede seguir “quemando gas”, pero para mejorar su explotación, especialmente en la zona sureste del país es necesario trabajar de la mano con el sector privado.
En este sentido, aseguró que es necesario detonar el desarrollo de infraestructura de almacenamiento de gas en cavernas salinas o en yacimientos petroleros agotados, una iniciativa que es apoyada por la Secretaría de Energía (Sener) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Garantizan suministro de electricidad en ola de calor
Durante la mesa de diálogo El sector eléctrico en México, dentro del mismo foto, Juan Antonio Fernández Correa, director de Planeación Estratégica de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), descartó que exista algún riesgo que durante la ola de calor que se presenta en la actualidad en el país pueda haber cortes de energía.
De acuerdo con el funcionario, la capacidad instalada de generación del país asciende a 88 mil MW, mientras que el consumo registró ayer un máximo histórico de 50 mil 968 megawatts.
Además, el funcionario dijo que la Secretaría de Energía integra en el Proyecto de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (Prodesen) presentado en mayo, la posibilidad, que todavía no está garantizada, de integrar una tercera central de generación nuclear en Laguna Verde, con una capacidad de mil 600 MW.
Añadió que en 2020 la primera central de generación obtuvo la ampliación de la licencia para operar por 30 años más por parte de la Asociación Mundial de Operadores Nucleares (UANO, por sus siglas en inglés), mientras que el proceso para la segunda central se concretará en 2025.
Heberto Barrios, subsecretario de la Política de Transición de la Sener, coincidió en que este proyecto está en análisis, por lo que la puerta no se ha cerrado en México para el desarrollo de la energía nuclear.