(Foto: Senado de la República)
México no es la causa de los problemas de la industria siderúrgica estadounidense, pero si Estados Unidos se empeña en imponer aranceles a un socio comercial y aliado confiable como México, entonces es importante que el Senado de la República haga una manifestación apoyando a estas industrias, afirmó el senador Waldo Fernández González.
En reunión de trabajo de la Comisión de Economía de la Cámara de Senadores con representantes del sector automotriz, el legislador advirtió que, ante la posible imposición de aranceles del 25 por ciento por parte de Estados Unidos a la exportación de acero y aluminio mexicanos, esa Cámara debe cerrar filas para defender a esta industria, pues representa una de las principales fuentes de empleo del país.
Al indicar que México y Estados Unidos son mercados complementarios, Fernández González se pronunció por que ambas naciones exploren mecanismos y formas de colaboración dentro del tratado comercial TMEC para trabajar en oportunidades, retos y riesgos comunes que enfrentan como región.
“Necesitamos enfrentar juntos la creciente amenaza del comercio desleal. No podemos hacerlo aislándonos o castigando a uno de los aliados estratégicos”, expresó el senador por el Partido Verde Ecologista Mexicano (PVEM).
Por su parte, el presidente de la Comisión de Economía, Emmanuel Reyes Carmona, consideró que los aranceles son “un balazo en el pie” por parte gobierno norteamericano y sostuvo que no pueden ser vistos como una “política multipropósito”.
Argumentó que los aranceles no solucionan los problemas de competitividad de Estados Unidos, sino, por el contrario, son el camino hacia la inflación y una menor producción.
Al respecto, dijo que actualmente ningún mercado puede prosperar sin recibir insumos de otras partes del mundo o acceda a otros mercados con fines de exportación.
No obstante, a pesar de la amenaza de Estados Unidos de imponer aranceles al acero y aluminio nacionales, el senador consideró que México está preparado para cualquier escenario que se presente.
Posturas de la industria automotriz
En la reunión, los representantes del sector automotriz mexicano insistieron en la necesidad de proteger a esa industria ante la imposición de los aranceles, por el considerable crecimiento que ha tenido en los últimos años y que ha puesto a México en competencia con países como Alemania, Japón y España.
Tal es la relevancia de la producción de automóviles en México, que incluso fue factor determinante para que se lograran las negociaciones del TLCAN en los años noventa y del reciente TMEC, aseguró Juan Pablo Calderón Patiño, asesor de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Francisco González Díaz, presidente ejecutivo de la Industria Nacional de Autopartes (INA), advirtió que independientemente del impacto para México, si Estados Unidos implementa aranceles al acero mexicano, el precio promedio de los coches en ese país se incrementará en tres mil dólares en promedio, además de que necesitará crear por lo menos 18 nuevas fábricas automotrices e invertir más de 50 mil millones de dólares en el sector.
Por último, el presidente de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), Rogelio Arzate, recordó que solamente Norteamérica hace el 98.7 por ciento de las exportaciones de vehículos de este tipo, por lo que el TMEC es relevante para la industria automotriz mexicana.