La Comisión Nacional de Hidrocarburos discutirá mañana la Terminación Anticipada por renuncia a una parte del Área Contractual del campo Zama, que fue asignada en la Ronda 1.1 a Talos Energy.
Durante su Sexta Sesión Ordinaria, el regulador emitirá su pronunciamiento sobre el inicio y la tramitación de este asunto, donde Pemex busca hacerse con la operación de una parte del área contractual, debido a que se encima con el campo Uchukil, que pertenece a la petrolera mexicana.
La resolución podría poner fin a la disputa entre el gobierno de México y el consorcio liderado por la empresa estadounidense sobre uno de los 10 campos más grandes descubiertos en la historia del país.
En caso de proceder, la Renuncia irrevocable del Contratista a una parte del Área Contractual es una forma de dar por terminado anticipadamente el Contrato en relación con la parte del Área Contractual en cuestión, sin que ello afecte las obligaciones del Contratista respecto a la terminación del Programa Mínimo de Trabajo y su Incremento; las penas convencionales correspondientes; el Abandono y la entrega de la parte del Área de acuerdo con lo establecido en la Cláusula 17 del Contrato; y la renuncia y devolución del Área Contractual de conformidad, de acuerdo con los lineamientos de la CNH.
La semana pasada, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que sostuvo reuniones con 16 empresas estadounidenses en materia energética, donde se negoció con Talos Energy para que mantenga sus operaciones en Zama, y Pemex se quede como administrador.
Zama es un yacimiento en aguas someras frente a las costas de Tabasco, con un potencial de 850 millones de barriles de petróleo crudo equivalente, mismo que fue asignado a Talos Energy, en consorcio con Harbour Energy y Wintershall DEA en la ronda uno que se realizó en 2015.
Este es el descubrimiento más grande hecho hasta el momento por una empresa privada y producto de la Reforma Energética de 2013-2014.
Las declaraciones del presidente ocurren después de que Talos informó en septiembre que presentó una notificación de disputa ante el gobierno de México, luego de que la Secretaría de Energía determinó que Pemex sería el operador del campo que compartía la empresa estadounidense con la asignación Uchukil, perteneciente a la empresa mexicana.