Ulises Juárez / Energía a Debate
Con una capacidad de 950 megawatts de generación eléctrica, el proyecto de concentrado de energía térmica solar y energía fotovoltaica (Concentrate Solar Power, CSP-PV), en fase de construcción en la ciudad de Dubái, en Emiratos Árabes Unidos, es una mega central que combina diversas tecnologías para el aprovechamiento de la energía solar, rompiendo el mito del obstáculo que representa la intermitencia en las renovables.
Este proyecto, con el nombre NOOR Energy 1, representa la cuarta fase de un proyecto más ambicioso llevado a cabo bajo un esquema bipartita de gobierno e iniciativa privada, consistente en cinco etapas que resultarán en el parque híbrido, o CSP-PV, más grande del mundo.
Con una inversión total de unos 6,000 millones de dólares, al término de su construcción el proyecto integral tendrá una capacidad instalada de 3,000 megawatts (MW), más una sexta fase en planeación que agregaría otros 2,500 MW adicionales, según refirió Bernardo del Castillo, head of Health and Safety and Environment, Business Continuity and Compliance para ACWA Power, una de las 53 compañías de distintas partes del mundo que participan en el desarrollo del proyecto.
“Yo creo que lo más importante del proyecto es que representa lo último de lo último en términos de tecnología, de ingeniería, de conocimiento y, sobre todo, de visión. Es lo que lo hace interesante”, dijo Del Castillo durante una transmisión especial y en directo desde Dubái para el programa en línea “Corto Circuito”.
“Es la clara representación del futuro en el aprovechamiento de la energía solar”, subrayó el especialista en esta primera de dos entregas en el programa producido por P21 Energía.
También destacó que, gracias a la combinación de espejos que dirigen la energía solar hacia una torre que recibe el calor del astro y la lleva a un sistema con base en aceite y sales que, a su vez, la transforman en vapor para el movimiento de las turbinas, el parque llamado “Mohammed bin Rashid al-Maktoum” podrá producir energía durante la noche hasta 80% de su capacidad total, lo que permite superar el reto de la intermitencia de los sistemas fotovoltaicos tradicionales.
Para tener una dimensión de la magnitud del proyecto, el parque ocupa una extensión de unos 44,000 kilómetros cuadrados en pleno desierto, que es prácticamente la extensión de la Alcaldía Miguel Hidalgo de la Ciudad de México, y la capacidad instalada que tendrá una vez concluido, 5,500 MW, será aproximadamente dos veces el equivalente al consumo de la capital mexicana.
Respecto a lo que representa esta producción para Dubái, Víctor Ramírez Cabrera, socio de Perceptia 21 Energy y vocero de la Plataforma México Clima y Energía, refirió que la demanda actual de esa ciudad es de aproximadamente 14 gigawatts (GW), por lo que el parque equivale a poco más de la tercera parte de esa cantidad.
“Eso quiere decir que tendrán energía solar abasteciendo a Dubái prácticamente las 24 horas del día”, apuntó el analista del sector.
En México no existen proyectos de gran escala de energía térmica para la generación eléctrica, aunque en el norte del país existe potencial para instalar unos 20 proyectos eléctricos solares térmicos, calculó Ramírez.
Datos del CSP-PV de Dubai
Como se señaló más arriba, el NOOR Energy 1 es la cuarta fase de un proyecto más amplio desarrollado por un consorcio formado por empresas privadas y el organismo público Dubai Electricity and Water Authority (DEWA), bajo el esquema de Productor Independiente de Energía (IPP, por sus siglas en inglés), con un contrato tipo PPA (Power Purchase Agreement).
Si bien el proyecto tiene una participación del gobierno, no hay dinero público en él, sino que el financiamiento proviene de las empresas privadas, así como de fondos de inversión y la banca.
Según refirió Del Castillo, todo el proyecto CSP-PV es parte de la Estrategia 2050 de Dubái, la cual consiste a grandes rasgos en incrementar el uso de la energía limpia al 70% y bajar las emisiones de bióxido de carbono (CO2) en 70%; ahorrar por lo menos unos 19 billones de dólares en la reducción del uso de combustibles fósiles, y aumentar la eficiencia en el consumo energético, en lo individual y en lo empresarial, en 40%.
Para lograr estos y otros objetivos, la Estrategia 2050 se apoya en cinco pilares: infraestructura; legislación y gobernanza; financiación; capacidad y habilidades de construcción, y un “mix” de energías limpias de bajo impacto ambiental.
De acuerdo con el plan, el parque CSP-PV evitará la emisión de 6.5 millones de toneladas de CO2 al año.
El NOOR Energy 1 se compone de tres partes esenciales para producir 950 MW. La primera de ellas consiste en un sistema de espejos parabólicos que concentran la luz solar en un fluido de transferencia de calor (Heat Transfer Fluid, HTF) dentro de una tubería que pasa por los espejos que calientan sales fundidas, mismas que producen el vapor que mueve las turbinas. Este proceso suma unos 600 MW.
El segundo, de 100 MW, tiene un receptor de la luz solar proveniente de los espejos, el cual concentra la luz mediante heliostatos dispuestos en un concentrador que, a su vez, está colocado en la parte superior de una torre de 262 metros de altura, lugar donde se calientan las sales fundidas.
Los 250 MW restantes se obtienen a partir de páneles solares policristalinos. El total de esta energía será utilizada por el parque para su operación, con lo cual se busca que el proyecto sea de cero emisiones.
El parque contará con 13.5 millones de espejos que dirigirán la luz solar a la torre, y más de 750 kilómetros de tuberías HTF.
Entre otras cosas, para la construcción de parque se necesitó remover más de 50 millones de metros cúbicos de arena, hay más de 250 vehículos de construcción, 95 grúas de 20 a 650 toneladas y 350 dumpers para el movimiento de tierras y arena.
La central, que da unos 7,000 empleos directos, cuenta con una planta de concreto propia y 2 edificios de ensamblado automatizado, en donde se fabrican alrededor de 60 espejos diariamente, además de todos los servicios e instalaciones de seguridad, mantenimiento y otros.
Abril Moreno, socia fundadora de Perceptia 21 Energy, enfatizó la visión a futuro del gobierno de los Emiratos Árabes Unidos con respecto a la energía.
“Es la visión de los gobernantes en el país, con esta visión del futuro, de la movilidad”, comentó. “Técnicamente es algo de lo que muchos en México quisiéramos tener esta perspectiva”, añadió.
Elié Villeda, especialista en Energía Fotovoltaica, apuntó hacia el papel de la combinación de las distintas tecnologías en el proyecto, con el fin de eliminar la intermitencia, además de las líneas de transmisión de tipo corriente directa de alto voltaje, o HVDC, para desahogar la energía producida por la mega central.
Por su parte, Paul Alejandro Sánchez, también socio de Perceptia 21 Energy, destacó la disponibilidad de energía que ofrecerá el proyecto de Dubái en los Emiratos Árabes Unidos.