Además de las complicaciones financieras que enfrenta Pemex, la empresa tiene un puntaje de impacto crediticio Ambiental, Corporativo y de Gobernanza (ESG) “muy negativo”, advierte Moody’s.
En su acción de calificación, la agencia señaló que la compañía que dirige Octavio Romero Oropeza tiene una exposición al riesgo ambiental muy alta, y una exposición al riesgo social que también es considerada alta, y un riesgo de gobierno corporativo en la misma categoría, lo que incluye una estrategia financiera y una gestión de riesgos débiles, a lo que se suma una estructura directiva y políticas y procedimientos débiles.
En materia ambiental, Moody’s detalla que Pemex tiene una exposición muy negativa impulsada principalmente por un riesgo de transición de carbono muy alto, un riesgo de capital natural alto, a lo que se suma una mala gestión del agua, desechos y de contaminación.
El pasado 20 de junio, Energía a Debate señaló que Pemex tiene una asignatura pendiente en la gestión de los Gases de Efecto Invernadero, pues no cumplió con las metas establecidas en el Plan de Negocios 2021-2025.
La petrolera presentó las metas y resultados del documento correspondiente al año pasado ante el Consejo de Administración.
En el documento, la compañía recuerda que estableció cuatro metas distintas para las emisiones de dióxido de carbono.
La primera de ellas corresponde a las emisiones de gases de efecto invernadero en las actividades de exploración y producción de petróleo y gas.
En ella, la empresa estableció la emisión de 22.99 toneladas de dióxido de carbono equivalente sobre millón de barriles de petróleo crudo equivalente (tCO2/Mbpce). No obstante el reporte detalla que en realidad las emisiones alcanzaron 44.81 tCO2/Mbpce, casi el doble de lo programado.
La historia se repite en el proceso de crudo en las refinerías, donde las emisiones superaron 29.5 por ciento a lo establecido como objetivo.
Al revisar las cifras de emisiones de GEI en los complejos procesadores de gas, estas superan en 77.5 por ciento lo establecido, mientras que el peor caso se presentó en la petroquímica, donde los objetivos fueron rebasados en 182.5 por ciento.
Además, recientemente la Agencia Espacial Europea presentó un estudio en el que descubrió que el campo Zaap-C, del complejo Ku Maloob Zaap, mismo que tuvo un periodo de “emisiones extraordinarias” de metano, un gas que es más dañino que el CO2 para el cambio climático.
En este sentido, Moody’s detalló que las empresas integradas con una alta exposición al negocio upstream se enfrentarán a una presión cada vez mayor con el tiempo, en particular los productores de petróleo, mientras continúan los esfuerzos de descarbonización y la transición hacia una energía más limpia.
Otros riesgos
En materia social, la calificadora detalló que la exposición de Pemex es muy negativa, impulsada principalmente por los apartados de salud y seguridad, la producción responsable y las presiones demográficas y sociales.