Redacción / Energía a Debate
El pasado 1 de octubre entró en operación comercial del gasoducto de Zapotlanejo, en el municipio del mismo nombre en el estado de Jalisco, el cual tiene una capacidad de transporte de 535 millones de pies cúbicos diarios (mmpcd) de gas natural en sus 5 kilómetros de longitud.
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) y la empresa Gas Natural del Noroeste (GNN) informaron este lunes que el ducto se interconecta por un lado con el gasoducto Villa de Reyes – Aguascalientes – Guadalajara (VAG), administrado por la empresa Fermaca, y por el otro extremo con el Sistema de Transporte y Almacenamiento Nacional Integrado de Gas Natural (Sistrangas).
El sistema VAG, agregó la CFE, forma parte de la ruta conocida como Wahalajara.
Este último es un sistema que permite importar gas natural de Waha, del lado oeste de Texas, Estados Unidos, a la zona de Guadalajara, Jalisco, y cuyo tramo sur entró en operación apenas a principios de junio de este año.
El gasoducto de Zapotlanejo, por tanto, permitirá el suministro del energético a las centrales de generación de la CFE ubicadas en el Valle de México y en la zona de Salamanca, Guanajuato, así como a consumidores de gas natural del sector privado, como las empresas ArcelorMittal.
Asimismo, el sistema permitirá inyectar gas natural a la central eléctrica de ciclo combinado Tierra Mojada, propiedad de Fisterra Energy – Tierra Mojada, en construcción igualmente en Zapotlanejo y que contará con una capacidad instalada de 874 megawatts (MW) para entrega a la CFE.
La CFE destacó que el ducto permitirá a los consumidores de gas natural de la región acceder al “gas natural más barato del mundo” proveniente de la zona de Waha.
Lo anterior, a precios competitivos, generando empleos e impulsando desarrollo económico en la región centro y occidente del país, agregó.