La Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés) estimó que para 2030 la capacidad instalada de energía renovable se duplique, incluso cuando el sector enfrenta dificultades en las cadenas de suministro, la integración de la red y el financiamiento.
El organismo internacional detalló que las fuentes renovables mantienen un crecimiento sólido, impulsadas principalmente por el rápido auge de la energía solar fotovoltaica.
En este sentido, el reporte anual Renovables 2025 estimó que la capacidad mundial instalada alcanzará 4,600 gigawatts en 2030, lo que equivale a sumar la capacidad de generación de China, la Unión Europea y Japón.
La energía solar fotovoltaica representará alrededor del 80 por ciento del aumento mundial de la capacidad de energía renovable en los próximos cinco años, impulsada por los bajos costos y los plazos de tramitación más rápidos, seguida de la energía eólica, la hidroeléctrica, la bioenergía y la geotérmica.
“Las instalaciones geotérmicas están en camino de alcanzar máximos históricos en mercados clave, como Estados Unidos, Japón, Indonesia y diversas economías emergentes y en desarrollo. Los crecientes desafíos para la integración en la red eléctrica están renovando el interés en la energía hidroeléctrica de bombeo, cuyo crecimiento se prevé casi un 80 por ciento más rápido en los próximos cinco años en comparación con los cinco anteriores”, señala el organismo internacional.
El reporte añade que las economías emergentes de Asia, Oriente Medio y África, la competitividad en costos y un mayor apoyo político impulsan un crecimiento más rápido de las energías renovables, y muchos gobiernos están introduciendo nuevos programas de subastas y elevando sus objetivos.
India se encamina a convertirse en el segundo mayor mercado de energías renovables en crecimiento a nivel mundial, después de China, y se espera que alcance cómodamente su ambicioso objetivo para 2030.
A nivel empresarial, la confianza en las energías renovables se mantiene sólida. La mayoría de los principales promotores han mantenido o aumentado sus objetivos de despliegue para 2030 en comparación con el año pasado, lo que refleja la resiliencia y el optimismo del sector.
Sin embargo, la energía eólica marina tiene una perspectiva de crecimiento 25 por ciento menor a la del informe del año pasado como resultado de cambios en las políticas en mercados clave, cuellos de botella en la cadena de suministro y el aumento de los costos.
“El crecimiento de la capacidad renovable mundial en los próximos años estará dominado por la energía solar fotovoltaica, pero también contribuirán la energía eólica, la hidroeléctrica, la bioenergía y la geotérmica”, declaró Fatih Birol, director ejecutivo de la AIE.
“La energía solar fotovoltaica está en camino de representar alrededor del 80 por ciento del aumento de la capacidad renovable mundial en los próximos cinco años. Además del crecimiento en los mercados consolidados, se prevé un auge de la energía solar en economías como Arabia Saudí, Pakistán y varios países del Sureste Asiático. A medida que aumenta la importancia de las energías renovables en los sistemas eléctricos en muchos países, los responsables políticos deben prestar especial atención a la seguridad de la cadena de suministro y a los desafíos de la integración en la red eléctrica”, añadió.
La perspectiva del informe sobre el crecimiento de la capacidad renovable mundial se ha revisado ligeramente a la baja en comparación con el año pasado, debido principalmente a los cambios en las políticas en Estados Unidos y China. La eliminación gradual anticipada de los incentivos fiscales federales, junto con otros cambios regulatorios en Estados Unidos, redujo nuestras expectativas de crecimiento para las energías renovables en el mercado estadounidense en casi 50 por ciento en comparación con la previsión del año pasado. La transición de China de tarifas fijas a subastas está afectando la economía de los proyectos, lo que ha reducido la previsión de crecimiento de las energías renovables en el mercado chino.
Estos ajustes se ven parcialmente compensados por el dinamismo en otras regiones, en particular en India, Europa y la mayoría de las economías emergentes y en desarrollo, donde las perspectivas de crecimiento se han revisado al alza debido a nuevas políticas ambiciosas, mayores volúmenes de subastas, una tramitación más rápida de permisos y un mayor despliegue de sistemas solares en tejados.
Los acuerdos corporativos de compra de energía, los contratos con las empresas de servicios públicos y las plantas comerciales también son un factor clave, representando en conjunto el 30 por ciento de la expansión mundial de la capacidad renovable hasta 2030, duplicando su participación en comparación con la previsión del año pasado.
Se espera que la energía solar fotovoltaica domine el crecimiento de las energías renovables de aquí a 2030, manteniéndose como la opción de menor costo para la nueva generación en la mayoría de los países.
Mientras que la energía eólica, a pesar de sus desafíos a corto plazo, sigue lista para una expansión considerable a medida que se alivien los cuellos de botella en el suministro y avancen los proyectos, especialmente en China, Europa e India.
La energía hidroeléctrica y otras tecnologías renovables seguirán desempeñando un papel importante en el apoyo a los sistemas eléctricos y la mejora de la flexibilidad.
Cadenas presionadas
El reporte de la Agencia advierte que las cadenas de suministro globales de energía solar fotovoltaica y elementos de tierras raras utilizados en turbinas eólicas siguen estando muy concentradas en China, lo que pone de relieve los riesgos constantes para la seguridad de la cadena de suministro.
Si bien se están realizando nuevas inversiones para diversificar las cadenas de suministro en países de todo el mundo, se prevé que la concentración en China para segmentos clave de producción se mantenga por encima del 90 por ciento hasta 2030.
Al mismo tiempo, el rápido auge de las energías renovables variables está ejerciendo una presión cada vez mayor sobre los sistemas eléctricos. Ya se están produciendo restricciones y eventos de precios negativos en más mercados.
Esto pone de manifiesto la necesidad de inversión urgente en redes eléctricas, almacenamiento y generación flexible.
Varios países están empezando a responder con nuevas subastas de capacidad y almacenamiento, pero se necesitará mucho más para garantizar que las energías renovables variables se integren de forma rentable y segura.
Se prevé que el papel de las energías renovables en el transporte y la calefacción aumente en los próximos años, aunque solo ligeramente.
En el sector del transporte, se prevé que su participación en el consumo energético aumente del cuatro por ciento actual al seis por ciento en 2030, impulsado principalmente por la electricidad renovable para vehículos eléctricos en China y Europa, y que los biocombustibles impulsen el crecimiento en Brasil, Indonesia, India y otros mercados clave.
Además, la participación de las energías renovables en la energía utilizada a nivel mundial para proporcionar calefacción a edificios e industrias pasará del 14 por ciento al 18 por ciento durante el periodo previsto.