El precio del referente petrolero estadounidense, West Texas Intermediate (WTI), rompió una racha de dos semanas con cierres negativos.
En la semana que concluye hoy, el petróleo estadounidense acabó con un avance de 8.69 por ciento en relación con el resultado del viernes pasado.
Así, el WTI acabó la semana en 79.77 dólares por barril.
Durante la semana, hubo varios factores que impulsaron al valor del hidrocarburo. El primero de ellos fue una baja en los riesgos para la oferta, pues el terremoto en Turquía y Siria detuvo los flujos de petróleo procedente de Irak y Azerbaiyán, a través del puerto turco de Ceyhan.
“El gobierno de Azerbaiyán ha declarado un estado de fuerza mayor (circunstancias imprevisibles que impiden cumplir un contrato) en las exportaciones que salen de ese puerto”, declaró Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base.
En segundo término, existe un optimismo por la recuperación de la demanda de China, pues el fin de semana el director de la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés), Fatih Birol, dijo que aproximadamente la mitad del crecimiento esperado de la demanda mundial de petróleo procederá de China.
Asimismo, existe una disminución en la percepción del riesgo ante una recesión económica en Estados Unidos, pues durante enero se crearon 517 mil empleos, lo que apunta a un mercado laboral fuerte y podría respaldar la demanda de petróleo.
Finalmente, el precio del petróleo fue impulsado por una posible reducción en la oferta de crudo ruso.