La llegada de inversiones podría verse afectada por la “fragilidad del sector eléctrico”, pues es una de las principales preocupaciones entre los tomadores de decisiones a nivel mundial, de acuerdo con Citibanamex.
En el estudio Examen de la situación económica de México. Cuarto trimestre 2022, el banco recuerda que el país ha atravesado por diferentes factores que han desatado incertidumbre, principalmente a partir de las políticas y decisiones tomadas por el gobierno federal.
Si bien entre las decisiones que más han afectado el apetito por la inversión en el país está la cancelación del aeropuerto de Texcoco al inicio de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, a esta se ha sumado la reforma energética, las acciones que han debilitado a los organismos autónomos, y, “más recientemente, las disputas comerciales en el mardo del T-MEC con Canadá y Estados Unidos”.
En este sentido, el banco recordó que entre 2020 y 2021, el número de declaraciones de emergencia eléctrica aumentó 70.6 por ciento y el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), encargado del control operativo del Sistema Eléctrico Nacional, ha proyectado un “aumento del riesgo de apagones en estados del norte y del centro”.
De acuerdo con el Programa Nacional de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional 2022-2036 (Proddesen), la producción de energía tendría que crecer de 86GW en 2021 a 110GW en 2026, ya que se espera que el consumo neto de electricidad aumente 2.9 por ciento al año entre 2022 y 2027.
El banco recordó que de acuerdo con cálculos de la calificadora internacional Fitch Ratings, la inversión necesaria para alcanzar los objetivos del gobierno en materia de generación de electricidad se ubica en el rango de 26 mil a 32 mil millones de dólares, mismos que se deben complementar con 20 mil millones de dólares adicionales de inversiones en transmisión y distribución.