Un estudio elaborado por el área de investigación del banco BBVA señala que en México, 91 por ciento de las empresas ubicadas en parques industriales del país han sufrido desabasto de energía, una situación que pone en riesgo la llegada de nuevas empresas a partir del nearshoring.
A través de una encuesta hecha a los miembros de la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados (AMPIP), el banco detectó que los establecimientos en Chihuahua, Coahuila, Baja California y Nuevo León reportan que del total de afectaciones, 39 por ciento corresponden a temas energéticos y 21 por ciento a temas relacionados con el agua.
Por su parte, los parques industriales ubicados en Guanajuato, Jalisco, Querétaro y Estado de México, destacaron que sus principales problemas están relacionados con el sector energético, a lo que se suma la ineficiencia en trámites con un promedio de 31 por ciento para estas entidades.
“México debe preparar su matriz energética para una expansión enfocándose en el desarrollo de energías renovables que, además de ser más eficientes en términos de costos, representan una mejora en términos de emisiones que en el mediano plazo podría ser un requisito cada vez más relevante para las empresas”, destaca la encuesta del banco.
La encuesta añadió que es urgente considerar las incidencias reportadas por las empresas dentro de los parques industriales, principalmente en términos de oferta energética, misma que debe ser limpia y a precios competitivos.
En caso de que se logre avanzar en la materia, el país podría mejorar su competitividad en el entorno del nearshoring.
Esto se lograría a través de una mejora regulatoria en trámites y permisos, lo que permitirá reducir el número de incidencias que las empresas de parques industriales reportan.
El banco señala que es imperativo mejorar estas áreas de oportunidad, pues la decisión de las empresas para instalarse en un parque industrial depende de factores como la perspectiva del mercado doméstico y exterior, las condiciones comerciales y tratados, así como la infraestructura instalada en términos energéticos, logística, agua, y de seguridad.