Redacción / Energía a Debate
La empresa calificadora Fitch Ratings ratificó este miércoles su nota “Incumplimiento de Emisor” para los bonos de largo plazo en moneda local y extranjera de Petróleos Mexicanos (Pemex).
La calificadora, cuyos servicios fueron prescindidos por la petrolera a principios de marzo de 2021, otorgó una nota de ‘BB- / perspectiva estable’, por lo que los documentos de Pemex se mantienen en el grado que en el mercado se conoce como “bonos basura” desde abril del año anterior.
La nota envía al mercado la señal de que los bonos de la empresa a cargo de Octavio Romero Oropeza presentan un alto grado de incumplimiento de los compromisos financieros.
En cuanto a la perspectiva “estable”, con ella Fitch denota que no existe un riesgo de que se presente un nuevo recorte en la nota en un periodo de 12 a 18 meses.
Respecto al soberano, la calificadora también confirmó las calificaciones nacionales de largo plazo de Pemex en ‘A mex’ y las de corto plazo en ‘F1 mex’.
“Las calificaciones de Pemex reflejan el vínculo moderado de la compañía con la calidad crediticia de México, junto con su débil Perfil Crediticio Independiente”, expuso la firma en un comunicado.
“El vínculo moderado entre las calificaciones de Pemex y las del soberano refleja la demora y la incertidumbre de un apoyo significativo del gobierno debido a las dificultades financieras de Pemex derivadas de los altos impuestos”, agregó.
Fitch insistió en la “flexibilidad limitada”, la alta carga fiscal y las altas necesidades de inversión de Pemex para mantener la producción y la reposición de reservas, por lo que previó que la paraestatal necesitará en el corto plazo un “apoyo gubernamental significativo”.
De hecho, Romero Oropeza anunció el pasado 18 de marzo, en ocasión del 83er Aniversario de la Expropiación Petrolera, que el gobierno federal absorberá a partir de este año las amortizaciones por la deuda de Pemex, cuyo monto ascenderá a los 6.4 mil millones de dólares para finales de 2021 (ver esta liga).
La calificadora también consideró que la debilidad crediticia de la petrolera se debe las altas transferencias de recursos al gobierno federal, las cuales promediaron 28% de las ventas de crudo en el plazo de los últimos tres años.
El pasado 2 de marzo, Pemex anunció que finalizaría el contrato con Fitch Ratings México y argumentó la crisis financiera por la que atraviesan tanto el país como la empresa misma, la cual le ha dado las menores calificaciones y notas.
Aun con ello, Fitch afirmó que seguirá brindando el servicio a sus demás clientes e inversionistas en el país.