Redacción / Energía a Debate
Los organismos autónomos que dependen del Poder Ejecutivo serán absorbidos primero y después se revisarán los que tienen que ver con el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), anunció esta mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Estamos trabajando, ya se forman los equipos. Vamos a empezar primero con los que dependen del Ejecutivo y luego vemos el análisis y la revisión de los que requieren modificaciones de ley”, afirmó en su conferencia matutina.
“Si hay alguno que tiene que ver con el Tratado de Libre Comercio, todo eso se tiene que cuidar, permanecerían los que tienen que ver con el Tratado de Libre Comercio”, agregó y explicó que la idea es trasladar las funciones de los organismos a las diferentes dependencias de la administración federal.
Especificó que, en el caso de los organismos del sector energético, fueron creados para mantener la privatización y garantizar los intereses de las empresas que venden energía eléctrica a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), además de que, según el mandatario federal, existen duplicidades en funciones.
Desde que tomó posesión al cargo, López Obrador ha insistido en que los organismos autónomos federales deben desaparecer. Inició una serie de ataques hacia el ex comisionado presidente de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), Guillermo García Alcocer, que derivó en su renuncia en junio de 2019.
Los organismos autónomos del sector energético son la CRE y la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH). La primera fue creada por Decreto presidencial del 4 de octubre de 1993 y entró en funciones un año después, como un organismo descentralizado de la entonces Secretaría de Energía, Minas e Industria Paraestatal (Semip) encargado de resolver asuntos de carácter técnico en materia energética relacionados con la aplicación de la Ley Reglamentaria del Artículo 27 Constitucional.
Entre otras funciones, la CRE también elabora estudios sistemáticos para la revisión del marco normativo que rige las actividades del sector, proponiendo adecuaciones, modificaciones y actualizaciones a la norma.
Inicialmente, la CRE otorgaba permisos a privados en materias de gas natural y electricidad, para posteriormente ampliar esta facultad a temas de combustibles.
La CNH, por su parte, surgió también por Decreto presidencial el 28 de noviembre de 2008 y quedó formalmente instalada seis meses después.
Su función principal fue la de regular y supervisar la exploración y extracción de hidrocarburos en el territorio nacional, así como el procesamiento, almacenamiento y transporte de petróleo y gas relacionados con la exploración y extracción.
Así como la CRE, la CNH también se constituyó como un organismo de carácter técnico para opinar sobre la restitución de reservas, incorporación de las mismas, ritmo de extracción, factor de recuperación de yacimientos, evaluación técnica de proyectos y estudio y aplicación de las mejores prácticas en la materia.
La reforma energética de 2013-2014 dotó de mayores facultades a estos dos organismos para regular y normar la participación de privados nacionales y extranjeros en los distintos segmentos de la cadena de valor de los subsectores de la energía, como petróleo, gas, electricidad, combustibles, energías renovables, etcétera, lo que quedó plasmado en la Ley de los Órganos Reguladores Coordinados en Materia Energética.
Los comisionados en ambos casos deben ser propuestos por el presidente de la República, pero evaluados y, en su caso, aprobados por la Cámara de Senadores. Para garantizar la imparcialidad de los miembros de las Comisiones, el periodo de sus cargos no está en función de tiempos políticos ni sexenales, además de que la ley que los rige especifica los requerimientos en conocimientos y experiencia en las áreas que correspondan para declarase la idoneidad de los candidatos.
Para 2021, la CRE y la CNH recibieron como presupuesto 253 y 219 millones de pesos, respectivamente, contra los 417 mil millones de pesos que se autorizaron a la Comisión Federal de Electricidad de gasto programable, esto es, menos del 1% en proporción, considerando que la empresa eléctrica, además, recibió 29,800 millones de pesos para gasto no programable.
Este jueves, el jefe del Ejecutivo reiteró la intención de fusionar a los organismos autónomos a la Secretaría de Energía.
“Dejamos los organismos y quitamos la Secretaría de Energía”, dijo irónico. “¿Para qué es entonces la Secretaría de Energía?, porque tener además de la Secretaría de Energía 10 organismos autónomos, ¿qué funciones desempeña? Y son unas arañas sus estructuras administrativas, sus aparatos, sus organigramas, todo eso va a debate y aquí se va a presentar”, subrayó.