Redacción / Energía a Debate
La organización ambientalista Greenpeace México obtuvo por fin la suspensión definitiva contra los Acuerdos emitidos por la Secretaría de Energía (Sener) y el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) que limitarían la participación de las energías renovables privadas en el Sistema Eléctrico Nacional, de acuerdo con la resolución del Juzgado Segundo de Distrito en Materia Administrativa emitida el día de ayer.
En su resolución, el juez Juan Pablo Gómez Fierro, quien ha dado seguimiento al caso desde que Greenpeace interpuso el recurso de amparo, argumentó:
“Resulta necesario recordar que la prohibición para que las centrales eléctricas eólicas y fotovoltaicas puedan realizar pruebas preoperativas previo a su inicio de operaciones comerciales, que se encuentra contenida en el Acuerdo de la CENACE, se justificó en la necesidad de garantizar la eficiencia, calidad, confiabilidad, continuidad y seguridad del sistema eléctrico durante la pandemia causada por el virus SARS-CoV2 (Covid-19); sin embargo, pareciera ser que no existe una relación causal entre esa razón y la finalidad que se persigue.”
Más adelante, el juzgador manifestó: “En ese sentido, preliminarmente no se advierte cómo es que la realización de las pruebas preoperativas podría poner en riesgo el sistema eléctrico, sobre todo si se tiene presente que tales acciones permiten que puedan entrar en operación centrales que producen electricidad a través de energías limpias”, se lee en el documento dado a conocer esta mañana.
Al respecto, el juez remató: “Pareciera no ser el mejor método para garantizar la eficiencia, calidad, confiabilidad, continuidad y seguridad del sistema eléctrico”.
El fallo del Poder Judicial determina al final que todas las autoridades competentes acaten la resolución y suspendan cualquier acto que limite las pruebas preoperativas y cualquier otro que impida la operación del sistema eléctrico en la forma en que lo hacía previo a la emisión de los dos Acuerdos.
“Se precisa que las autoridades responsables y vinculadas al cumplimiento de esta determinación deberán aplicar las disposiciones que se encontraban vigentes previamente a la expedición de los actos reclamados”, instruye el documento jurídico.
Evidencian contradicción respecto al combustóleo
A unas horas de que se diera a conocer el fallo del juzgador, Greenpeace México utilizó las instalaciones de la central termoeléctrica de Tula, ubicada en el estado de Hidalgo, con el fin de mostrar la contaminación que se produce al generar electricidad con base en el combustóleo, lo que impide “gozar el cielo, el sol y el aire puro” como lo señala el punto 6 del Decálogo para salir del coronavirus y enfrentar la nueva realidad, presentado el 13 de junio pasado por el presidente de Andrés Manuel López Obrador.
Para evidenciar esta contradicción y pedir una transición energética hacia fuentes renovables que respeten los derechos humanos, activistas de la organización proyectaron una serie de mensajes sobre las columnas de humo y vapores de las torres de la refinería y la termoeléctrica de Tula, tales como: “¿Gozar del cielo y aire puro?”, “Aquí inicia el cambio climático”, “Aquí se produce energía sucia” y “Sener: el combustóleo mata”.
Respecto al fallo del juez Gómez Fierro, María Colín, especialista en Derecho Ambiental de la organización, dijo: “Con esta decisión se garantizan los derechos humanos a la salud, a un medio ambiente sano, a la sustentabilidad y a la legalidad”.
Por su parte, Anaid Velasco, coordinadora de Investigación del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), señaló que “la suspensión es congruente con la responsabilidad de garantizar mejores condiciones de vida para las generaciones presentes y futuras. Los impactos en el medio ambiente y en la salud de las personas expuestas a una mala calidad del aire por el uso de combustibles fósiles en la generación de electricidad así como las pérdidas y los daños de las comunidades por los efectos del cambio climático son cada vez mayores y requieren de decisiones proporcionales y alineadas con este escenario de vulnerabilidad”.
Greenpeace destacó que el Programa Sectorial de Energía 2020-2024 (Prosener), próximo a oficializarse, propone incrementar la quema de combustóleo para la generación de electricidad, así como aumentar la extracción y exploración de hidrocarburos, la capacidad de refinación y la extracción e infraestructura para gas natural, con el argumento de reducir las importaciones de combustibles, alejándonos de la reducción de emisiones para combatir el cambio climático.