La organización Mujeres en Energías Renovables México (MERM) encabezó el lanzamiento de la Plataforma Latinoamericana de Mujeres en Energías Renovables (MERL), que tiene el objetivo de promover la participación femenina en el sector y acelerar la equidad de género en toda la región.
En conferencia de prensa para presentar la plataforma Patricia Tatto, directora y fundadora de MERM, aseguró que el lanzamiento de la plataforma se realizó en paralelo a la COP 26, pues es muy importante definir cómo se va a trascender en la transición energética mundial.
El lanzamiento de la Plataforma Latinoamericana permitirá romper los paradigmas de la falta de equidad y aseguró que la unión hace la fuerza para responder a estas necesidades.
El diagnóstico de MERM, dijo, es que para romper esas brechas era necesario ganar terreno en los puestos de decisión, tanto de políticas públicas como a nivel empresarial, cultural y educativo.
“Nos dimos cuenta que para avanzar en la transición energética, una de las tareas más importantes que tiene la región en la actualidad es cerrar la brecha de género en todos los sectores”, aseguró Tatto.
Fuensanta Gleason, socia fundadora de MERM, aseguró que la Plataforma Latinoamericana de Mujeres en Energías Renovables tiene el objetivo de ampliar las oportunidades de empleo de todas y todos hacia una comunidad más equitativa, favorecer el empoderamiento de la mujer del W20, ONU Mujeres y el Pacto Mundial de la ONU.
Para ello, MERL cuenta con el programa Energía que Empodera. “Es esta energía que une esfuerzos de todas y todos por medio de talleres, capacitaciones, podcast, artículos, eventos, mentorías, networking, voluntariados y una bolsa de trabajo en toda la región”, mencionó.
En estas actividades, añadió Gleason, se integrarán temas de transición energética, pero también se promoverá la inclusión femenina y empoderamiento de la mujer en todos los niveles de su vida.
De acuerdo con Patricia Tatto, el sector energético es uno de los que tiene mayores brechas de género y es particularmente notorio en los cargos medios y en los de gerenciamiento y liderazgo.
Reducir la brecha contribuye a la eficiencia económica, mejora la capacidad de innovación y aumenta la capacidad para resolver conflictos, así como mejoras en los resultados financieros, asegura Tatto.
La UNESCO señala que la igualdad de género es un principio relativo a los derechos humanos, un prerrequisito para un desarrollo sostenible centrado en las personas y un objetivo en sí misma.
LARGO CAMINO
En el sector energético, el papel de la mujer sigue teniendo grandes retos, avanzar en la toma de decisiones y en temas tan básicos como el acceso a la educación.
Durante la Mesa redonda: conversación con líderes y tomadores de decisión sobre el impacto de incorporar políticas inclusivas que ayuden a la transición energética, Nelson Delgado, director ejecutivo de la Asociación Mexicana de Energía Solar (Asolmex), mencionó que el Panel Intergubernamental de Cambio Climático, que es el organismo que recientemente alertó sobre la crisis climática que hay en el mundo, apenas tiene 20 por ciento de participación femenina.
Durante la mesa, Gema Sacristán, directora general de negocios del BID Invest, el brazo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) que trabaja con el sector privado, aseguró que la energía y el género confluyen en los mayores retos a nivel regional y forman parte de su estrategia institucional.
“Tenemos la Visión 2025, que es lo que nos guía cada día a Grupo BID, y ahí tenemos cinco ejes estratégicos que incluyen el cambio climático y el género, diversidad e inclusión. (…) Si pensamos en una recuperación mucho más sostenida, mucho más verde y más inclusiva, la realidad es que el tema de género es uno de esos ángulos”, aseguró.
Laurie Fitzmaurice, directora ejecutiva en el Centro de Política Energética Global de la Universidad de Columbia, coincide en que la transición energética debe ser justa, lo que incluye el rol de la mujer dentro de las empresas, la educación y las comunidades apartadas.
“Hablamos desde la mujer que recoge combustible en países de África, y las niñas que tienen que recoger el combustible no estudian. La transición energética tiene matices que vale la pena recordar”, mencionó la especialista.
Maricarmen Bernal, delegada para México del W20, comenta que la diversidad multiplica a las soluciones, porque permite tener distintos estilos de liderazgo y de resolución de problemas.
Añadió que en el mundo es necesario construir una estrategia que abarque distintas áreas y acciones para promover la inclusión de la mujer como estrategia de negocio.
Mencionó que en encuentros con empresarios, los tomadores de decisiones le han dicho que un taller de inclusión no cambia la cultura o la mentalidad de todos los integrantes de la empresa, especialmente de la alta dirección.
“Conforme tú hayas tenido experiencias de inclusión y diversidad, eso lo vas a plasmar. Entonces, tiene que ser un modelo holístico, que permita formar a mujeres que formen parte de estudios STEM, vincularse con las universidades para que promuevan que más niñas y jóvenes quieran estudiar estas carreras, y se sumen a este sector en el futuro”, aseguró Maricarmen Bernal.