Petróleos Mexicanos ya no sabe por dónde le va brincar la liebre y mucho menos cuánto le va a costar. Con eso de que el pasado sábado se presentó un “conato de incendio” en el área de tuberías de la Plataforma Akal-B1, del Centro de Proceso Akal-B, en aguas de la Sonda de Campeche, seguramente tendrá que ajustar sus expectativas de producción que, por cierto, no han sido las mejores en los últimos meses. Además de los trabajadores heridos y un lamentable deceso, según el último reporte de la petrolera, el Centro dejará de operar por un tiempo, en un momento en que la producción del campo va en franca declinación. En mayo de 2018, estaba produciendo 51 mil 775 barriles diarios promedio de aceite, más 1 mil 75 millones de pies cúbicos diarios de gas. Al primero de febrero de este año, el campo solo producía 16 mil barriles y 655 millones de pies cúbicos, respectivamente. Además, de acuerdo con reportes locales, el accidente en Akal llega en muy, pero muy mal momento, porque se asegura que la empresa bajo el mando de Octavio Romero Oropeza no cuenta con suficiente equipo de emergencia, como lanchas y helicópteros, porque la ...